La extorsiòn telefònica, un mal cada vez màs comùn.

Hay cosas que han cambiado en nuestro pais en un corto periodo de tiempo, sin duda el hecho de una crisis global que afectò el crecimiento de las economias y el desempleo de millones de personas en el mundo ha de ser de lo mas anecdòtico. Pero Mèxico en estos dias ha vivido su propio infierno, una condena impuesta por su misma gente, en dias de verdadera sozobra es increible la manera en la que el ser humano (y el mexicano siendo mas especificos) busca llevar una vida còmoda, de lujos, pero que no se permiten ganarsela con el sudor diario de una jornada de trabajo. 

Hoy en dia, nuestro pais es vìctima de seres asì, sin escrùpulos, que aman ese estado de vida que son capaces de conseguir con una ètica deprorable y un sensibilidad minima ante las necesidades y la misma vida de otros. La delincuencia tiene mil cabezas, pero todas ellas sin duda atacan o terminaràn atacando al ciudadano comùn. Al joven estudioso, al profesionista emprendedor y hasta a las familias humildes. Porque la extorsiòn, el secuestro, el cobro de piso y las drogas mismas son un càncer que han impregnado la sociedad. Escudados en la falta de oportunidades estas lacras son capaces de los actos màs viles.

Quiero hablarles de algo tan comùn que quizà ustedes mismos en la comodidad de su casa lo han vivido, es el caso de las extorsiones telefònicos, una muestra clara de hasta donde estas redes criminales estan dispuestas a llevar su amenaza de intimidaciòn a cambio de unos pesos. Ojalà fuera eso solamente, pero la realidad es otra, son delincuentes apresados que no estan dispuestos aùn tras las rejas a perderse un botìn que ven en la gente comùn. Armados con celulares y una seccion amarilla actualizada realizan sus actos de terror. 

Y es que es indudable lo que un acto asi es capaz de transmitir a una familia, a una madre que recibe la llamada de que la vida de un ser querido de la familia pende del delicado hilo del dinero. Que detestable, usar el temor para por miles lanzar llamadas de miedo. Muchos habràn que lo ignoren y sigan su vida normal, otros, los menos, caeran bajo elengaño y daràn lo poco o mucho que tengan por un terror autentico.

El post era para contarles mi experiencia en casos de estos y desgraciadamente se que miles ya han sido testigos o por lo menos han oìdo hablar.

Estaba en mi casa por la noche haciendo tonterias que ahora no vienen a mi memoria, extrañado por el sonar tel telèfono me apresuro a cntestar, eran las 11:30 asi que me preocupaba encontrarme con una mala noticia o ya desahogado un nùmero equivocado. Lo primero se reafirma cuando escucho una voz grave y fuerte que me llama, me saluda con un poco de cortesìa pero con un tono y acento que me incomoda. 

- ¡Buenas noches amigo! Le habla el director de seguridad de Rioverde.

No permite que le devuelva el saludo, despues de decirme el nombre que ya no recuerdo, de todas formas algo anda mal aqui, pensè. ¿Què hace un director de seguridad llamando a mi casa?

- Mire amigo, lo que pasa es que llamo para informarle que alguien en su casa hizo una denuncia para alertar de la presencia de 3 camionetas sospechosas por alli cerca de su casa, la llamada fue hecha por alguien de esa casa porque quedò registrada en el "identificador de llamadas". ¿Es usted una persona mayor?

- Mmmm... algo - le respondo.

- Se encuentra la señora de la casa a quien esta registrada este nùmero, me gustarìa hablar eso con ella. O hay otra persona mayor de edad en la casa - me cuenta buscando ser serio, pero cordial.

- La señora no se encuentra ahora, pero estoy yo.

- ¿Còmo te llamas amigo? ¿Què edad tienes? - me pregunta 

- Me llamo Chencho y soy mayor. ¿Porquè? 

- Mira Chencho, lo que pasa es que los vehiculos reportados fueron asegurados y si pertenenecian a ese grupo delictivo tan puesto de moda actualmente, los de la letra. Solo quiero corroborar la denuncia hablando con las personas que los denunciaron. Cuantos miembros de la familia hay amigo, quien crees que haya sido el que haya hecho la llamada. - habla elevando la voz para que sienta un poco la presiòn y la seriedad del momento.

- No se, no tengo idea quien pudo haber sido. La realidad es que no creo que haya sido nadie. - le contesto con espectativa.

- No es juego Chencho, dime si eres mayor, ¿Tienes algun hermano mayor? ¿Hay algùn otro adulto en casa ahora? - me pregunta un tanto nervioso ya y con tal insistencia que me incomoda en demasia.

- Mire, esto no tiene ningun caso, nadie hizo la llamada de la que habla y usted si es quien dice ser no tendrìa que andar haciendo estas preguntas y menos por telèfono. Le voy a colgar. - coloco el auricular en la base y me voy para mi cama. Vaya pèrdida de tiempo pensè.

Al otro dia, mi prima en su casa super asustada. Regañando al muchacho porque estaba incrèdula en que èl haya sido quien haya hecho la famosa llamada. Yo me sorprendo, le pregunto que porque le reclama. Me dice que porque anoche recibiò una llamada donde le aseguraban que alguien de su casa denunciò unas camionetas.

- ¡Ahhhhh! Pero eso no es cierto, buscan sacar informaciòn de tu familia, para despuès llamarte ya con nombres y edades para extorsionarte y decirte que lo tienen por alli a la vista.

- ¡Nooooo! - casi grita - Yo les dije todo, de mi marido que no estaba, de mis hijos donde estudian y cuantos años tienen y de quien estaba a esa hora en casa.

- Mmm... vaya, eres el puerquito de esas gentes. Ya le habia pasado algunas veces cosas parecidas.

A final de cuentas eso pasò hace tiempo. Muchos de la colonia y hasta de comunidades dijeron recibir esas llamadas, pero esas eran las light. Estaban las de amenazas, las de que la vida de un miembro de la familia dependia de la rapidez con la que entregaran el dinero. En fin.

Esa fue mi experiencia, la que me toco vivir, ya que en mi familia van como 4, a ver si se animan a contar una propia. Me quedo con una frase que vi en Youtube que da una clara muestra del tipo de personas con las que se trata.

"Prefiero morirme en la calle con un fusil en la mano, que vivir en la plaza vendiendo semillas."

Por lo menos tienen una mentalidad poètica.